"Aprender a escribir el nombre propio es aprender algo muy especial, ya que forma parte de la propia identidad… Desde el punto de vista de su función en la psicogénesis de la lengua escrita, se ha enfatizado su importancia como "primera forma escrita dotada de estabilidad". Antes de que el niño comprenda por qué ésas y no otras son las letras de su nombre, ni por qué el orden de esas letras es ése y no otro, su nombre escrito puede darle información pertinente y valiosa. Le indica que no cualquier conjunto de letras sirve para cualquier nombre; le indica que el orden de las letras no es aleatorio; le ayuda a comprender que el comienzo del nombre escrito tiene algo que ver con el comienzo del nombre cuando lo dice" (Ferreiro E. y Gómez Palacio, M., 1982, Fascículo 4, pág. 103).
Sin duda el nombre representa para el niño una escritura muy
significativa ya que contiene un valor afectivo muy importante: le pertenece y lo acompañará toda su vida.
Al principio lo copiará, lo
reproducirá de memoria, pero esa copia será válida porque primero solo dibujará las letras de su nombre pero luego lo reconocerá como propio, lo encontrará escrito en sus pertenencias.
Este primer abecedario de los chicos, conformado por las letras que construyen su nombre, pasará a ser fuente de información y de formulación de
hípótesis , porque a partir de él podrá
relacionarlo, compararlo y asociarlo con otras escrituras.
Por ejemplo, escrituras que comiencen o terminen igual que su nombre, que contengan algunas de sus letras.Luego podrá darse cuenta que su nombre al igual que otras palabras se escriben siempre de la misma manera, es decir que su orden no se puede alterar y llevará siempre las mismas letras.
Algunas actividades que se pueden realizar en torno a la escritura del nombre:
- Elaborar
cartelitos con el nombre de cada alumno/a del grupo (con imanes o
velcro)y utilizarlos en el intercambio inicial de la jornada para reconocerlo entre todos los otros nombres y colocarlo en el "árbol de los presentes", de este modo estarán a mano para que los niños puedan acceder a ellos cuando lo necesiten.
- Utilizar los mismos carteles como modelo de copia, para ponerle el nombre a los dibujos, a los objetos de pertenencia de cada uno, etc.
- Calcar el cartel con papel transparente.
- Buscar y cortar en hojas de diarios y revistas letras del nombre. Pegarlas utilizando (o no) el cartel para ver en qué orden van. Llevarse el
collage resultante de regalo a casa.
- Hacer una lista de los nombres para establecer turnos, consultarla periódicamente para ver "a quién le toca...".
- Jugar al "bingo de letras": cada uno tiene un cartón con su nombre, y un compañero saca todas las letras del abecedario de una caja para que los demás vayan tachando, subrayando,
reescribiendo o pintando en su cartón las letras que salen.
-Presentar un cartel con el nombre escrito y dividido con líneas para recortar y formar un
rompecabezas. Los cortes pueden ser:
1 corte recto en forma horizontal
1 corte recto en forma vertical.
cortes separando sílabas.
cortes separando todas las letras
1 corte sinuoso
1 corte recto irregular.
- Jugar a la mancha, con una "casa" o "refugio" para cada chico, y donde se reconoce qué casa es de quién con
cartelitos con los nombres escritos. Se puede previamente realizar esta actividad usando sólo las iniciales, en este caso, podrán haber chicos que compartan su “casa”.
- Hacer un dibujo para regalarle a un amigo o amiga. Firmarlo con el nombre propio, y dedicarlo con el nombre del amigo, recurriendo, si es necesario al modelo de copia (los
cartelitos).
- Sobre una cartulina que tiene pegados con cinta de papel las letras del abecedario, cada chico tiene un cartón en blanco y
plasticola. Deben buscar y arrancar las letras que necesitan para armar su nombre y pegarlas sobre el cartón
-Invitar a los niños a modelar los nombres con tiritas de
plastilina.
De acuerdo al nivel de
conceptualización, se les puede dar un cartón con el nombre escrito (siempre con mayúscula), para que coloque las tiritas de masa sobre las letras.
-Cocinar galletitas, cada niño modelará con la masa su letra inicial o todas las letras de su nombre (aporte de Tihada)
- Colocar harina de maíz en bandejas
individuales para que los niños escriban su nombre con el dedo.
-Analizar , comparar y clasificar los nombres con las tarjetas a la vista (puede realizarse con todo el grupo, por equipos o parejas)
1)Nombres largos y cortos: El maestro explica: Van a mirar bien la tarjeta con su nombre y las de los compañeros.
Fíjense si todos los nombres son de igual largo. Los que tienen nombres cortos se van a sentar de un lado de la mesa y los que tengan nombres largos del otro.
El maestro permite que los niños se cambien de lugar para poder observar mejor las tarjetas de sus compañeros, intercambien opiniones, discutan.
Una vez que han logrado la
clasificación nombres largos-nombres cortos, el maestro dice por ejemplo: Díganme un nombre corto. Ahora
escríbanlo en el
pizarrón. Díganme un nombre largo. ¿Quién quiere pasar a escribirlo? ¿Cuántos tienen nombre corto?, ¿Y nombre largo? ¿Qué es más largo, decir Juan o Valentina? ¿Con cuántas letras se escribe Juan? ¿Y Valentina?, etc.
2)Letra inicial. Cada equipo, y posteriormente toda la clase, observan las tarjetas y se agrupan todos aquellos niños cuyos nombres tengan la misma letra inicial; los escriben en el
pizarrón o colocan el cartel y luego los leen al grupo. El maestro hace preguntas que lleven a la
comparación de las diferentes escrituras: ¿Con qué letra empiezan todos estos nombres? ¿ ¿Todos empiezan igual? ¿Las demás letras también son iguales? ¿Qué otras letras tienen iguales?, etc.
Jugar a cambiar las iniciales (¿cómo sería Lucía si empezara con la "M" de
Matías? ¡
Mucía!)
3)Letra final. Mediante esta actividad los niños tomarán conciencia de que la mayoría de los nombres femeninos terminan con a y la mayor parte de los masculinos con o.
El maestro pide a los niños de un equipo que agrupen todos los nombres que acaban con o. Pregunta: Los nombres de
quiénes terminan con o. ¿Qué hay más, niños o niñas con el nombre
terminado en o? Puede darse el caso de nombres femeninos con esa terminación; es el caso de Rosario, o de masculinos con otras
terminaciones como sucede con
Omar,
Rubén, José o Rafael.
Hacer las mismas
actividades con la letra final a.
4)Letra inicial y final. Es probable que en el grupo existan nombres en los que las letras iniciales y finales coincidan. En ese caso se podrán comparar con todo el grupo,tomando un par de nombres por vez. El maestro dice, por ejemplo: Aquí están los nombres de Juan y Joaquín
¿Dónde dirá Juan? ¿Y Joaquín? ¿En qué se parecen los nombres de estos dos niños? ¿Por qué el de Joaquín es más largo?, etc.
5)Nombres compuestos. Es posible que en el grupo, algunos niños posean nombres formados por dos palabras y que alguna de ellas coincida con el nombre de otro alumno o con una parte del
mismo, si éste es compuesto.
JUAN
JUAN PABLO
JOSÉ LUIS
JUAN JOSÉ
JOSÉ
MARÍA CLARA
ANA MARÍA
El maestro conduce al grupo hacia la
identificación de la parte igual contenida en esos nombres y hacia el
descubrimiento de su significado. Por ejemplo: Aquí María Clara y Ana María escribieron
sus nombres. ¿En qué se parecen? ¿Qué dirá en estos
pedacitos que son iguales (MARÍA)? Si aquí María Clara escribió todo su nombre y aquí dice María, ¿qué dirá en esta otra parte (CLARA)?¿Qué dirá acá (ANA)?
Para seguir leyendo sobre el tema les recomiendo este documento con 5 textos de varios autores propuestos por
Myriam Nemirovsky: